El término «trastornos del desarrollo» hace referencia al grupo de alteraciones o problemas que interfieren en la adecuada maduración y que se presentan desde el nacimiento o, con mayor frecuencia, en la primera infancia. Las alteraciones del neurodesarrollo implican dificultades en el desarrollo y funcionamiento del cerebro, que no siempre se muestran en lesiones estructurales, aunque suelen derivar en ellas (1).
Dentro de los trastornos del neurodesarrollo encontramos los trastornos motores, los cuales afectan al crecimiento del niño o niña interfiriendo en el aprendizaje, en la movilidad, en las relaciones sociales, etc.
En los trastornos motores hay ciertos aspectos para tener en cuenta, como es la edad, la detección precoz o incluso la autolesión.
Son numerosos los trastornos que pueden afectar a la motricidad, de forma permanente o transitoria, a nivel osteoarticular, muscular y/o nervioso. Podemos organizar los problemas relacionados con el movimiento de la siguiente manera:
- Problemas en el desarrollo de la coordinación fina y gruesa (torpeza, lentitud e imprecisión).
- Problemas de coordinación viso-motora y de motricidad gráfica.
- Falta de definición de las lateralidades (es decir, confunde derecha-izquierda).
- Trastorno del propio esquema corporal.
- Presencia de comportamientos estereotipados.
- Retrasos de maduración.
- Carencia de control sobre la postura y el movimiento voluntario.
- Falta de organización del movimiento (dispraxia).
- Incapacidad de realizar correctamente un movimiento (apraxia).
- Inseguridad postural y motriz.
- Debilidad motriz.
Muchas de las dificultadas citadas anteriormente, suelen manifestarse en las siguientes señales:
- Dificultades para aprender a gatear.
- Empezar a andar después de los 15 meses.
- Problemas para abrocharse los botones, hacer lazos o coger el lápiz.
- Problemas de equilibrio (ej. para aprender a montar en la bici).
- Problemas con la previsión y la planificación.
- Problemas con los conceptos de espacio y tiempo.
- Problemas de atención y concentración.
- Problemas en el aprendizaje escolar.
- Mareo por movimiento.
- Malas posturas.
Cuando se decide trabajar sobre el desarrollo motor y las habilidades relacionadas, se pueden conseguir cambios importantes en la conciencia del propio cuerpo, en la coordinación motora y la seguridad postural, en el control del movimiento voluntario y, por consecuencia, en el comportamiento diario del niño y en su forma de expresar emociones y estados de ánimo (2).
Se entiende por Atención Temprana el conjunto de intervenciones dirigidas a la población infantil de 0 a 6 años, a la familia y al entorno, que tienen como objetivo dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presentan los niños con trastorno en su desarrollo o que tienen riesgo de padecerlos (3).
Estas intervenciones, que deben considerar la globalidad del niño, han de ser planificadas por un equipo de profesionales de orientación interdisciplinar o transdisciplinar destinadas a favorecer el óptimo desarrollo y la máxima autonomía personal de los menores. Su objetivo es minimizar y, en su caso, eliminar los efectos de una alteración o discapacidad, así como la aparición de discapacidades añadidas, facilitando la plena inclusión familiar, escolar y social y la calidad de vida del menor y su familia (4).
Los equipos que trabajan la atención temprana pertenecen a diferentes campos profesionales. Los logopedas, psicólogos, fisioterapeutas o terapeutas ocupacionales son los principales perfiles que atienden en las consultas especializadas.
El logopeda se ocupa de prevenir, evaluar y tratar trastornos de comunicación y del lenguaje en la infancia, entre otras cosas. Si el niño presenta disfunciones a nivel motor y postural, será probablemente tratado por el fisioterapeuta y si los problemas están más relacionados con la participación del niño en el desempeño ocupacional y las actividades de la vida diaria sería el terapeuta ocupacional el encargado de trabajar con el niño. Sin embargo, lo más frecuente es que el niño requiera de la atención de más de un profesional de la atención temprana.
Las intervenciones se planifican en base a las necesidades de cada niño. No obstante, estas son las fases generales que siguen los centros de atención temprana:
- Valoración inicial, en la que se recopila toda la información sobre el caso y posteriormente se evalúa al niño, su entorno y se determina el plan de intervención más adecuado.
- Intervención de atención temprana en consonancia a su rutina escolar.
- Evaluación y seguimiento del caso hasta que se considere el alta del caso (5).
BIBLIOGRAFIA:
- Galán-López IG y cols. Trastornos del neurodesarrollo. Rev Hosp Jua Mex 2017; 84(1): 19-25.
- Blog PsicoSalud. https://psicologosenbenidorm.com/terapia-infantil/dificultades-motoras/
- ATAI. https://atenciontemprana-atai.es/atencion-temprana
- Página de la comunidad de Madrid. https://www.comunidad.madrid/servicios/servicios-sociales/atencion-temprana
- Grupo ARIS. https://grupo-aris.es/atencion-temprana/terapia-ocupacional-y-estimulacion-en-atencion-temprana/