Con motivo del día internacional del ictus que es el 29 de octubre, queremos hacer un repaso de esta patología, su tratamiento y rehabilitación. Quedándonos con el mensaje de que hay vida después de un ictus.
Se entiende por ictus el trastorno brusco de la circulación cerebral. Afecta a los vasos sanguíneos que suministran la sangre al cerebro. Del mismo modo se denominan accidentes cerebrovasculares sobrevenidos (ACV). El ictus sería el equivalente a un infarto de corazón, pero en este caso en el cerebro.
Tipos principales de ictus
– Hemorrágicos (hemorragias cerebrales): Se producen en el momento en que un vaso sanguíneo se rompe.
– Isquémicos (infartos cerebrales): Ocurren cuando se obstruye una arteria por la presencia de un coágulo y otra sustancia que lo taponan.
Hay factores de riesgo que son inevitables, tales como: el sexo, los antecedentes familiares o la edad. Pero hay otros que sí puede evitarse, y son: el consumo excesivo de drogas, alcohol, tabaco, elevados niveles de colesterol, obesidad, vida sedentaria, dietas ricas en grasas y sal o la diabetes, entre otros.
El momento en el que se sufre un ictus, el daño que se produce puede dejar graves secuelas y ser irreparable. Tan solo un tercio de los pacientes se recupera completamente. Otro tercio queda con graves secuelas, y el otro tercio fallece.
Igual de importante es una vez estabilizado al paciente, comenzar con una rehabilitación adecuada que comenzará en la habitación el hospital y continuará de manera ambulatoria una vez que el paciente recibe el alta.
Recientes estudios han demostrado la capacidad de neuroplasticidad del sistema nervioso, que ya demostró el Dr. Ramón y Cajal. De ahí la importancia de la rehabilitación tanto física como cognitiva.
Siempre y cuando el cerebro está estimulado, seguirá existiendo neuroplasticidad.
En Crene trabajamos bajo el concepto Bobath como modelo de evaluación y tratamiento pionero en pacientes con daño cerebral sobrevenido, así como otras patologías de origen neurológico.
En la rehabilitación neurológica de Crene, no solo nos importa el paciente, sino que también es muy importante su entorno familiar. Contamos con profesionales sanitarios (neuropsicólogos) que ayudan al paciente y a su familia.
El factor tiempo es determinante en la detección de esta patología, por eso es muy importante saber cuáles son las señales que presenta un ictus para poder frenarlo lo más rápido posible y así suministrar cuanto antes el tratamiento adecuado. Además el 25% de las personas que lo padecen, mueren durante los siguientes 30 días. Por ello, queremos mostrártelas para que todos podamos hacer que se reduzcan el número de muertes y las secuelas producidas.
Señales que presenta un ictus
- Pérdida de fuerza en la cara, brazo y/o pierna de un lado del cuerpo.
- Trastornos de la sensibilidad de la cara, brazo y/o pierna de un lado del cuerpo.
- Pérdida súbita de la visión en uno o ambos ojos, parcial o total.
- Alteración repentina del habla, dificultad para expresarse, lenguaje que cuesta ser entendido por quien lo escucha.
- Dolor de cabeza de intensidad anormal y sin causa aparente.
- Sensación de vértigo, desequilibrio, inestabilidad, o caídas bruscas inexplicadas (si se acompaña de alguno de los síntomas anteriormente mencionados).
Si notáis alguno de estos síntomas, la persona debe ser trasladada lo antes posible a un hospital, puesto que las primeras horas desde el inicio de estos síntomas son determinantes.
Datos
- Es la primera causa de discapacidad en personas adultas. La segunda causa de muerte en España y la primera en la mujer española.
- El 75% de los ictus ocurren en personas mayores de 65 años.
- Entre un 15% y 20% afectan individuos de menos de 45 años.
- Uno de cada seis españoles va a sufrir un ictus a lo largo de su vida
- Extremadura, Asturias y La Rioja son las Comunidades Autónomas que registran mayor número de ingresos por ictus.
- La Sociedad Española de Neurología (SEN) ha puesto en marcha la mayor red nacional de pruebas de prevención del ictus. Se prevé atender aproximadamente a unas 10.000 personas. 45 hospitales participan en esta actividad.
El símbolo que identifica a las personas que se suman a esta acción de concienciación, es un lazo naranja. También podéis apoyarla con el hashtag: #diamundialictus.
Prevenir es vivir.
¡Ayúdanos a frenar el ictus!
Crene